Hechos 8 (RVG)
From Textus Receptus
(Difference between revisions)
Line 13: | Line 13: | ||
* [[Hechos 8:7 (RVG)|7]] Porque espíritus inmundos, dando grandes voces, salían de muchos poseídos; y muchos paralíticos y cojos eran sanados. | * [[Hechos 8:7 (RVG)|7]] Porque espíritus inmundos, dando grandes voces, salían de muchos poseídos; y muchos paralíticos y cojos eran sanados. | ||
- | * [[Hechos 8:8 (RVG)|8]] | + | * [[Hechos 8:8 (RVG)|8]] Y había gran gozo en aquella ciudad. |
- | * [[Hechos 8:9 (RVG)|9]] | + | * [[Hechos 8:9 (RVG)|9]] Pero había un hombre llamado Simón, el cual había ejercido la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, diciéndose ser algún grande. |
- | * [[Hechos 8:10 (RVG)|10]] | + | * [[Hechos 8:10 (RVG)|10]] A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Éste es el gran poder de Dios. |
- | * [[Hechos 8:11 (RVG)|11]] | + | * [[Hechos 8:11 (RVG)|11]] Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas los había hechizado mucho tiempo. |
* [[Hechos 8:12 (RVG)|12]] | * [[Hechos 8:12 (RVG)|12]] |
Revision as of 04:43, 5 December 2012
- 1 Y Saulo consentía en su muerte. Y en aquel tiempo fue hecha una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judasa y de Samaria, salvo los apóstoles.
- 2 Y unos varones piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran lamentación por él.
- 3 Y Saulo asolaba la iglesia entrando de casa en casa, y arrastrando hombres y mujeres los entregaba en la cárcel.
- 4 Pero los que fueron esparcidos, iban por todas partes predicando la palabra.
- 5 Entonces Felipe descendió a la ciudad de Samaria, y les predicaba a Cristo.
- 6 Y el pueblo, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo los milagros que hacía.
- 7 Porque espíritus inmundos, dando grandes voces, salían de muchos poseídos; y muchos paralíticos y cojos eran sanados.
- 8 Y había gran gozo en aquella ciudad.
- 9 Pero había un hombre llamado Simón, el cual había ejercido la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, diciéndose ser algún grande.
- 10 A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Éste es el gran poder de Dios.
- 11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas los había hechizado mucho tiempo.