Mateo 13 (RVG)

From Textus Receptus

(Difference between revisions)
Jump to: navigation, search
Current revision (08:00, 21 March 2016) (view source)
 
(10 intermediate revisions not shown.)
Line 1: Line 1:
 +
{{Books of the New Testament RVG}}
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]  Y aquel día salió Jesús de casa y se sentó junto al mar.
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]  Y aquel día salió Jesús de casa y se sentó junto al mar.
-
* [[Mateo 13:2 (RVG)|2]]
+
* [[Mateo 13:2 (RVG)|2]] Y grandes multitudes se juntaron a Él, y entrando Él en una barca, se sentó, y toda la multitud estaba a la ribera.
-
* [[Mateo 13:3 (RVG)|3]]
+
* [[Mateo 13:3 (RVG)|3]] Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
-
* [[Mateo 13:4 (RVG)|4]]
+
* [[Mateo 13:4 (RVG)|4]] Y cuando sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron.
-
* [[Mateo 13:5 (RVG)|5]]
+
* [[Mateo 13:5 (RVG)|5]] Y parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó luego, porque no tenía profundidad de tierra;
-
* [[Mateo 13:6 (RVG)|6]]
+
* [[Mateo 13:6 (RVG)|6]] Pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
-
* [[Mateo 13:7 (RVG)|7]]
+
* [[Mateo 13:7 (RVG)|7]] Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
-
* [[Mateo 13:8 (RVG)|8]]
+
* [[Mateo 13:8 (RVG)|8]] Mas parte cayó en buena tierra y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
-
* [[Mateo 13:9 (RVG)|9]]
+
* [[Mateo 13:9 (RVG)|9]] El que tiene oídos para oír, oiga.
-
* [[Mateo 13:10 (RVG)|10]]
+
* [[Mateo 13:10 (RVG)|10]] Entonces vinieron los discípulos, y le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas?
-
* [[Mateo 13:11 (RVG)|11]]
+
* [[Mateo 13:11 (RVG)|11]] Él respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado el saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
 +
 +
* [[Mateo 13:12 (RVG)|12]] Porque a cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; mas al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
-
* [[Mateo 13:12 (RVG)|12]]
+
* [[Mateo 13:13 (RVG)|13]] Por eso les hablo por parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden.
-
* [[Mateo 13:13 (RVG)|13]]
+
* [[Mateo 13:14 (RVG)|14]] Y en ellos se cumple la profecía de Isaías, que dijo: De oído oiréis, y no entenderéis; Y viendo veréis, mas no percibiréis.
-
* [[Mateo 13:14 (RVG)|14]]
+
* [[Mateo 13:15 (RVG)|15]] Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyen pesadamente, y han cerrado sus ojos; para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y con el corazón entiendan, y se conviertan, y yo los sane.
-
* [[Mateo 13:15 (RVG)|15]]
+
* [[Mateo 13:16 (RVG)|16]] Mas bienaventurados vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos porque oyen.
-
* [[Mateo 13:16 (RVG)|16]]
+
* [[Mateo 13:17 (RVG)|17]] Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
-
* [[Mateo 13:17 (RVG)|17]]
+
* [[Mateo 13:18 (RVG)|18]] Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador.
-
* [[Mateo 13:18 (RVG)|18]]
+
* [[Mateo 13:19 (RVG)|19]] Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Éste es el que fue sembrado junto al camino.
-
* [[Mateo 13:19 (RVG)|19]]
+
* [[Mateo 13:20 (RVG)|20]] Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra, y al instante la recibe con gozo,
-
* [[Mateo 13:20 (RVG)|20]]
+
* [[Mateo 13:21 (RVG)|21]] pero no tiene raíz en sí, sino que es temporal; pues cuando viene la aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego se ofende.
-
* [[Mateo 13:21 (RVG)|21]]
+
* [[Mateo 13:22 (RVG)|22]] Y el que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra; pero el afán de este mundo, y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
-
* [[Mateo 13:22 (RVG)|22]]
+
* [[Mateo 13:23 (RVG)|23]] Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye la palabra y la entiende, y lleva fruto; y lleva uno a ciento, y otro a sesenta, y otro a treinta por uno.
-
* [[Mateo 13:23 (RVG)|23]]
+
* [[Mateo 13:24 (RVG)|24]] Les relató otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante al hombre que sembró buena semilla en su campo;
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:25 (RVG)|25]] pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:26 (RVG)|26]] Y cuando la hierba salió y dio fruto, entonces apareció también la cizaña.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:27 (RVG)|27]] Y vinieron los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña?
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:28 (RVG)|28]] Y él les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos?
 +
 +
* [[Mateo 13:29 (RVG)|29]] Mas él dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:30 (RVG)|30]] Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y en el tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; mas recoged el trigo en mi granero.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:31 (RVG)|31]] Otra parábola les relató, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:32 (RVG)|32]] el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; mas cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, tal, que vienen las aves del cielo y anidan en sus ramas.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:33 (RVG)|33]] Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:34 (RVG)|34]] Todas estas cosas habló Jesús por parábolas a la multitud, y sin parábolas no les hablaba;
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:35 (RVG)|35]] para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta que dijo: En parábolas abriré mi boca; Enunciaré cosas que han estado escondidas desde la fundación del mundo.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:36 (RVG)|36]] Entonces Jesús despidió a la multitud, y se fue a casa, y sus discípulos vinieron a Él, y le dijeron: Decláranos la parábola de la cizaña del campo.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:37 (RVG)|37]] Respondiendo Él les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre;
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:38 (RVG)|38]] El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino; y la cizaña son los hijos del malo.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:39 (RVG)|39]] El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:40 (RVG)|40]] Así como la cizaña es recogida y quemada en el fuego; así será en el fin de este mundo.
-
* [[Mateo 13:1 (RVG)|1]]
+
* [[Mateo 13:41 (RVG)|41]] El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todo lo que hace tropezar, y a los que hacen iniquidad;
 +
 
 +
* [[Mateo 13:42 (RVG)|42]] Y los lanzarán al horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:43 (RVG)|43]] Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:44 (RVG)|44]] Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo; el cual hallándolo un hombre, lo esconde, y gozoso por ello, va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:45 (RVG)|45]] También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas;
 +
 
 +
* [[Mateo 13:46 (RVG)|46]] el cual, hallando una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:47 (RVG)|47]] Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que fue echada en el mar, y atrapó de toda clase;
 +
 
 +
* [[Mateo 13:48 (RVG)|48]] la cual llenándose, la sacaron a la orilla, y sentados, recogieron lo bueno en cestas, y lo malo echaron fuera.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:49 (RVG)|49]] Así será en el fin del mundo; los ángeles vendrán, y apartarán a los malos de entre los justos,
 +
 
 +
* [[Mateo 13:50 (RVG)|50]] y los lanzarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:51 (RVG)|51]] Jesús les dijo: ¿Habéis entendido todas estas cosas? Ellos respondieron: Sí, Señor.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:52 (RVG)|52]] Entonces Él les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:53 (RVG)|53]] Y aconteció que acabando Jesús estas parábolas, se fue de allí.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:54 (RVG)|54]] Y venido a su tierra, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de tal manera que ellos estaban atónitos, y decían: ¿De dónde tiene Éste esta sabiduría y estos milagros?
 +
 
 +
* [[Mateo 13:55 (RVG)|55]] ¿No es Éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos Jacobo, José, Simón y Judas?
 +
 
 +
* [[Mateo 13:56 (RVG)|56]] ¿Y no están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene Éste todas estas cosas?
 +
 
 +
* [[Mateo 13:57 (RVG)|57]] Y se escandalizaban en Él. Mas Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa.
 +
 
 +
* [[Mateo 13:58 (RVG)|58]] Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos.

Current revision

  • 1 Y aquel día salió Jesús de casa y se sentó junto al mar.
  • 2 Y grandes multitudes se juntaron a Él, y entrando Él en una barca, se sentó, y toda la multitud estaba a la ribera.
  • 3 Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
  • 4 Y cuando sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron.
  • 5 Y parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó luego, porque no tenía profundidad de tierra;
  • 6 Pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
  • 7 Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
  • 8 Mas parte cayó en buena tierra y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
  • 9 El que tiene oídos para oír, oiga.
  • 10 Entonces vinieron los discípulos, y le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas?
  • 11 Él respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado el saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
  • 12 Porque a cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; mas al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
  • 13 Por eso les hablo por parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden.
  • 14 Y en ellos se cumple la profecía de Isaías, que dijo: De oído oiréis, y no entenderéis; Y viendo veréis, mas no percibiréis.
  • 15 Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyen pesadamente, y han cerrado sus ojos; para que no vean con los ojos, y oigan con los oídos, y con el corazón entiendan, y se conviertan, y yo los sane.
  • 16 Mas bienaventurados vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos porque oyen.
  • 17 Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
  • 18 Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador.
  • 19 Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Éste es el que fue sembrado junto al camino.
  • 20 Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra, y al instante la recibe con gozo,
  • 21 pero no tiene raíz en sí, sino que es temporal; pues cuando viene la aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego se ofende.
  • 22 Y el que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra; pero el afán de este mundo, y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
  • 23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye la palabra y la entiende, y lleva fruto; y lleva uno a ciento, y otro a sesenta, y otro a treinta por uno.
  • 24 Les relató otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante al hombre que sembró buena semilla en su campo;
  • 25 pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue.
  • 26 Y cuando la hierba salió y dio fruto, entonces apareció también la cizaña.
  • 27 Y vinieron los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña?
  • 28 Y él les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos?
  • 29 Mas él dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo.
  • 30 Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y en el tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; mas recoged el trigo en mi granero.
  • 31 Otra parábola les relató, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;
  • 32 el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; mas cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, tal, que vienen las aves del cielo y anidan en sus ramas.
  • 33 Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
  • 34 Todas estas cosas habló Jesús por parábolas a la multitud, y sin parábolas no les hablaba;
  • 35 para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta que dijo: En parábolas abriré mi boca; Enunciaré cosas que han estado escondidas desde la fundación del mundo.
  • 36 Entonces Jesús despidió a la multitud, y se fue a casa, y sus discípulos vinieron a Él, y le dijeron: Decláranos la parábola de la cizaña del campo.
  • 37 Respondiendo Él les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre;
  • 38 El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino; y la cizaña son los hijos del malo.
  • 39 El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles.
  • 40 Así como la cizaña es recogida y quemada en el fuego; así será en el fin de este mundo.
  • 41 El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todo lo que hace tropezar, y a los que hacen iniquidad;
  • 42 Y los lanzarán al horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
  • 43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.
  • 44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo; el cual hallándolo un hombre, lo esconde, y gozoso por ello, va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
  • 45 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas;
  • 46 el cual, hallando una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.
  • 47 Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que fue echada en el mar, y atrapó de toda clase;
  • 48 la cual llenándose, la sacaron a la orilla, y sentados, recogieron lo bueno en cestas, y lo malo echaron fuera.
  • 49 Así será en el fin del mundo; los ángeles vendrán, y apartarán a los malos de entre los justos,
  • 50 y los lanzarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
  • 51 Jesús les dijo: ¿Habéis entendido todas estas cosas? Ellos respondieron: Sí, Señor.
  • 52 Entonces Él les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.
  • 53 Y aconteció que acabando Jesús estas parábolas, se fue de allí.
  • 54 Y venido a su tierra, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de tal manera que ellos estaban atónitos, y decían: ¿De dónde tiene Éste esta sabiduría y estos milagros?
  • 55 ¿No es Éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos Jacobo, José, Simón y Judas?
  • 56 ¿Y no están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene Éste todas estas cosas?
  • 57 Y se escandalizaban en Él. Mas Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa.
  • 58 Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos.
Personal tools